Desde la Copa Mundial de la FIFA Corea Japón 2002, McDonald’s lleva a cabo el programa Player Escort, el cual, para entrar al argot del marketing, es una activación de marca que le ha servido al fast food retailer a empatizar con los niños.

En esta ocasión, McDonald’s cumplió el sueño de una niña mexicana: Megan Huesca. La pequeña pudo caminar de la mano de su jugador favorito antes del partido en el que México derrotó a Alemania en el Estadio Luzhniki de Moscú.

Megan Huesca fue el amuleto perfecto para México, viajó a Rusia en compañía de su mamá para cumplir un sueño y salió al campo sonriente junto a su ídolo, que además fungió como capitán en este encuentro.

Al final del día, México derrotó a Alemania por primera vez en su historia en un partido de Copa Mundial de la FIFA y Megan disfrutó cada minuto de la experiencia.

Megan fue seleccionada para viajar a Rusia gracias a su participación en un campamento organizado por McDonald’s México y Glorias del Deporte, en el que participaron cerca de 80 niños en situación vulnerable. Por su creatividad y carisma, Megan fue partícipe y testigo de uno de los triunfos más importantes de la historia de la Selección Mexicana.

Más de 119,000 niños de 11 países en los que opera Arcos Dorados en la región participaron para ganar esta experiencia, y fueron seleccionados 45 provenientes de países como Argentina, Brasil, Perú, Panamá, Costa Rica y México, entre otros.

Además de ser parte en la ceremonia inicial de diversos partidos durante el mundial, los niños participarán en actividades lúdicas y educativas en su estadía en Rusia, haciendo de esta experiencia un episodio inolvidable.